Sirope de savia (arce y palma) 1 litro
LA CURA DEL SIROPE DE SAVIA DE ARCE Y PALMA 1 L.
El Sirope de Savia es 100% puro. Se compone de savia de arce de cultivo biológico recolectado en los vastos bosques de Canadá y de la savia de palmeras, crecidas en forma salvaje en las selvas tropicales del sur de Asia. Es un excelente edulcorante.
45,68 €
Referencia:
Marca:
Contenido: 1000ml.
Composión (100g):
Hidratos de Carbono 64.9g
Proteinas 1.1g
Grasas 0.0g
Minerales 1.2g
264 Kcal (1150Kj)/100g.
Preparación:
Un vaso de agua de aproximadamente 200 c.c
Dos cucharadas soperas de Sirope de Savia.
Dos cucharadas soperas de zumo de limón (medio limón)-recomendamos el limon ecologico libre de pesticidas.
Una pizca de canela en polvo o de pimienta picante (cayena).
Recomendaciones dietéticas:
Esta cura de desintoxicación que proponemos, es mucho más suave para el organismo que el ayuno completo, pues le permite a éste ir depurándose un poco más lento que con el ayuno completo.
La mayoría de las personas, debido a la forma de alimentarnos y a la cantidad de tóxicos que contienen los alimentos, (refinados, colorantes, conservantes, estabilizantes, etc.) tenemos las células, tejidos corporales y órganos muy cargados de tóxicos los cuales en un ayuno completo al suspender la ingesta de dichos tóxicos, y ayudados por la depuración realizada por el jarabe de arce y palma, puede dar lugar a una expulsión masiva de toxinas; esto puede originar algunos trastornos desagradables (no peligrosos) como pueden ser: cefaleas, diarreas, frío, etc. que en sí, no suponen una enfermedad sino un intento del organismo de eliminar los productos de desecho para recuperar la salud y que en el campo naturista denominamos "crisis curativas".
Si vamos a hacer la modalidad del semi-ayuno, y para que el tratamiento sea más eficaz, convendría en lo posible suprimir unos alimentos que por su contenido en toxinas retrasarían la acción depurativa y son los siguientes:
Sal refinada, embutidos.
Carnes rojas (cerdo, ternera, buey, etc.).
Fritos: patatas fritas, huevos (en general todo lo que se puede freír).
Pan blanco, harinas refinadas, etc.
Lácteos, quesos, yogures, etc.
Café, alcohol, bebidas carbónicas, etc.